VICTORIA PARA GANAR CONFIANZA
El Real Madrid afrontó un partido complicado en Estambul tras el parón de selecciones, ante un Anadolu Efes debilitado por varias bajas importantes. Pese al cambio de entrenador local, los blancos tenían una oportunidad clara de ganar. El encuentro empezó con dificultades por la energía rival. Sin embargo, el Madrid supo resistir los momentos adversos. La misión era vencer sí o sí, y lo lograron.
Mario Hezonja volvió a brillar con una actuación sobresaliente, liderando al equipo con 22 puntos y un gran impacto general. Okeke también destacó al inicio de la segunda parte con una racha anotadora decisiva. Lyles aportó en el último cuarto y Campazzo manejó el cierre del partido. Garuba, sin anotar, fue clave por su defensa y rebote. Sus acciones marcaron la diferencia en el tramo final.
La primera mitad del Madrid resultó decepcionante, pese al arranque perfecto de Hezonja. El equipo permitió demasiadas transiciones y sufrió la ausencia de Tavares por faltas tempranas. El Efes dominó el rebote y aprovechó desajustes defensivos en la pintura. Smits y Osmani sacaron ventaja de los emparejamientos. El Madrid necesitaba reorganizarse para la segunda parte.
Tras el descanso, los blancos subieron la intensidad defensiva y lograron equilibrar el rebote. Okeke encestó 10 puntos seguidos y Hezonja repitió la racha con otros 10. Campazzo sumó un triple clave en ese tramo. El Madrid parecía listo para romper el partido. Sin embargo, el Efes se mantuvo gracias al acierto exterior de sus pívots.
Smits y Osmani continuaron dañando desde el perímetro y con penetraciones bien ejecutadas. Allí apareció Garuba para frenar a los jugadores clave del Efes. Su defensa fue determinante para detener a Osmani con un gran tapón. El canterano volvió a mostrar su capacidad en partidos de alta exigencia. Su irrupción sostuvo al Madrid en momentos críticos.
En los minutos finales, Scariolo confió nuevamente en Garuba en lugar de Tavares. El equipo respondió con firmeza, especialmente en una jugada tras tiempo muerto con solo un segundo en el reloj. Maledon asistió a Deck en una acción perfectamente ejecutada. El Madrid tomó ventaja y ya no la perdió. La concentración fue la clave del cierre.
Aunque Osmani anotó un triple difícil sobre Garuba, Campazzo respondió de inmediato con otro lanzamiento decisivo. Ese acierto terminó de apagar las esperanzas del Efes. El triunfo significó la tercera victoria fuera de casa en la Euroliga. Además, consolida al Madrid en la lucha por los playoffs. El equipo demostró carácter y eficacia en los momentos determinantes.
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