Remontada en casa para sumar tres puntos en un partido muy irregular.
Jornada 29 y volvía La Liga, volvía el fútbol de verdad al Estadio Santiago Bernabéu una vez acabada la eterna tortura del parón de selecciones. El rival era un Leganés que, si bien su posición refleja el pánico del descenso, también es un equipo que ya ganó esta temporada a Barça y Atleti, altas credenciales para tener muy en cuenta que podrían dar un susto en el partido de hoy.
Carlo Ancelotti eligió el siguiente once inicial: Lunin; Fran García, Rüdiger, Asencio, Lucas Vázquez; Camavinga, Modric; Brahim, Bellingham, Güler; Mbappé. Antes del inicio de partido se guardó un respetuoso minuto de silencio por las víctimas por los terremotos de Birmania y Tailandia.
Seamos sinceros, el Madrid no jugó nada bien en el partido de hoy frente a un equipo al que podría y debería haber goleado pero una vez más la falta de ideas y la selección de malas decisiones en ataque unidas a una incompetente defensa, llevaron al equipo blanco a sufrir más de lo necesario para conseguir los 3 puntos.
Sin embargo, fue el propio Real Madrid quien se adelantaría en el marcador tras señalar el colegiado González Fuertes un penalty de Óscar sobre Arda Güler. En la repetición, el contacto pareció existir aunque fue señalado quizá de manera demasiado rigurosa. Mbappé, a lo panenka, transformó la pena máxima para hacer el 1-0 al minuto 32.
Poco duró la alegría pues el Leganés empataría el partido a la jugada siguiente. Sacó de centro el conjunto del sur de Madrid, Juan Cruz lanzó un ataque fulgurante encontrando a Rosier dentro del área quien cedía atrás para que Diego García, tras una serie de rechaces, solo tuviera que empujar el balón a gol para el 1-1 al minuto 33.
El Leganés se encontraría con doble premio al minuto 41, aprovechando una pérdida de balón inexplicable de Brahim y un mal retorno de la defensa madridista. El balón llegaría a Óscar, absolutamente solo en el costado izquierdo del ataque pepinero aprovechando la ausencia de Lucas Vázquez (descolocadísimo, bajando tarde y andando), y la falta de contundencia de Asencio (muy blandito a la hora de hacer frente al rival), para que nuestro ex canterano metiese un pase de la muerte para Raba que batía por bajo a Lunin.
Con este resultado llegaríamos al descanso, si bien la segunda parte sería distinta ya que desde el inicio se vio a un Madrid con ganas de reaccionar y darle la vuelta al resultado.
Así, al poco de volver de vestuarios, el Real Madrid conseguiría empatar el partido en una jugada rocambolesca. Un muy buen disparo de Bellingham era despejado por Dimitrovic, Brahim aprovechaba su rechace pero la defensa sacaba el gol en la línea mandando el balón al larguero y volviendo a dejar muerto otro rechace que esta vez sí, era aprovechado por Jude Bellingham para hacer el 2-2 al minuto 47.
Pudo empatar Diego García en la siguiente jugada para el Leganés, pero esta vez el delantero no pudo definir bien de cara a puerta y su ocasión se marchó desviada.
Llegados a la hora de partido, y tras una amonestación a Asencio por una pequeña tangana, Ancelotti daría entrada a Vini y Rodrygo para dar más chispa en ataque en detrimento de un flojo Brahim y un Arda Güler que, pese a haber forzado el penalty inicial, estuvo de nuevo desacertado. Entraría Fede Valverde también en el 72 en lugar de Lucas Vázquez a quien le vino demasiado grande este partido a tenor de lo visto en su partido.
Poco después de la entrada de Fede, llegaría el definitivo 3-2 al minuto 76. Una falta forzada por Rodrygo al borde del área era lanzada, de manera indirecta, entre Fran García y Mbappé. Estos dos toques abrieron la barrera del Leganés y ahí aprovechó Kylian para colar el balón al fondo de la red sorprendiendo a Dimitrovic.
El Leganés quemó sus naves en los últimos 15 minutos de partido con sus titulares y sus numerosos recambios desde el banquillo pero no puedo conseguir su tan ansiado empate.
Y no hubo tiempo más, somos segundos 6 por encima del Atleti y, de momento, empatados a puntos con el Barcelona a expensas de que mañana pueda haber suerte y se dejen puntos. Pero por lo pronto, esto sigue y la cabeza ya ronda la Copa del Rey del martes frente a la Real Sociedad en lo que será una nueva historia que contar.
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