REAL MADRID 2-3 CHELSEA: DEL DRAMA A LA ÉPICA

 

Según la RAE, sufrir es “sentir físicamente un daño, un dolor, una enfermedad o un castigo” Pues hoy el Real Madrid ha sufrido. Y mucho. Es inexplicable que después de que un equipo te haga 27 disparos totales, se quede eliminado de una competición como la Champions. Noche trágica con final feliz.

Partido no apto para cardíacos. En pocos minutos se ha pasado del sufrimiento al alivio, del verbo aliviar: “quitar a alguien o algo parte del peso que sobre él o ello carga. Del drama a la épica. Así es el Real Madrid. Es algo que no se puede entender.

Es increíble la resistencia que tiene este equipo. Haciendo uno de los peores partidos de la temporada, ha conseguido clasificarse a las semifinales de la UEFA Champions League. Sometido por el Chelsea en todo momento, el campeón de Europa se lo ha creído y ha estado apunto de dejar fuera al Real Madrid.

Pero a este club nunca hay que darlo por muerto. Dos zarpazos, uno de Rodrygo y Benzema han bastado para tumbar a un equipo muy superior durante los 90 min. Con la soga en el cuello, el Real Madrid ha sido capaz de quitársela y dar la vuelta a la tortilla. ADN blanco.

Todos nos hemos dado cuenta de que el Real Madrid no sabe jugar cuando tiene un resultado o una ventaja clara en el partido de ida. Ya le pasó hace unos años ante la Juventus, que ganó 0-3 en la ida y en el Bernabéu el equipo italiano llegó a ponerse 0-3 e igualar el marcador. En ese encuentro, el Real Madrid al final se clasificó con un penalti a Lucas Vázquez que transformó Cristiano Ronaldo.

Es increíble lo del Real Madrid en Champions. Muchos no lo entenderán y quizás no haya una razón clara. Se puede llamar épica, heroicidad, lucha, entrega, como queráis. Ante las adversidades se antepone como nadie. Sudando la gota gorda, pero en semis. Y el Bernabéu rugiendo. Porque con el rey no se juega.

ANÁLISIS DEL PARTIDO

La pizarra de Ancelotti

El Real Madrid de Carlo Ancelotti salió con un 4-4-2, mismo once que en la ida con la única baja de Militao por sanción, sustituido por Nacho. La intención del equipo blanco era anular al Chelsea en ataque con un centrocampista más en la medular como Fede Valverde.

El uruguayo es una pieza clave para este Real Madrid y, además, en varios tramos del partido, se le ha visto por la banda derecha como un extremo más y ayudando a los suyos atrás. Arriba, la clase de Karim Benzema, que marcó un hat trick en la ida y el desequilibrio de Vinicius con sus carreras y regates. Aunque hoy ambos estuvieron más aplicados en defensa que en ataque.

 

La pizarra de Tuchel

El Chelsea de Thomas Tuchel planteó un 3-5-2 sobre el terreno de juego con diversas variaciones con respecto al partido de ida. Los blues apuestan por un 9 de referencia, con Timo Werner en ataque.

La medular estaba compuesta por Kanté  y Kovacic, dos centrocampistas que le han dado mucho equilibrio al equipo. Además las subidas de Reece James y Marcos Alonso han generado mucho peligro en ataque en el área del Real Madrid en todo momento.

PRIMERA PARTE

Los primeros 45 minutos fueron de dominio total del Chelsea. A pesar de que el equipo de Ancelotti salió bien los primeros minutos, el gol del conjunto inglés llegó temprano y mató a un Real Madrid que tardó en despertar, y, hasta que no se vio casi eliminado, no reaccionó.

Fue en el minuto 15 cuando se empezó a gestar el drama en el Bernabéu. Un error defensivo del Real Madrid hizo que el Chelsea encontrara a Mount prácticamente dentro del área que con un disparo colocado, batió a Courtois para poner el 0-1 en el marcador y meter miedo al Real Madrid.

Las ocasiones y los acercamientos eran para el Chelsea todo el tiempo y el segundo gol pudo llegar en el minuto 34”, con un disparo lejano de Rudiger que estuvo a punto de encontrar la escuadra de Courtois. Dominio total de los blues que se lo creyeron en todo momento.

SEGUNDA PARTE

La segunda mitad volvió a ser un monólogo del Chelsea y el segundo gol llegó más temprano que el de la primera parte. Nada más empezar, a los 5 minutos marcó el 0-2 el equipo inglés en un gol que no debió subir al marcador, ya que vino de un córner que era saque de puerta.

Aun así, el gol fue a balón parado de saque de esquina, donde Rudiger remató prácticamente solo de cabeza cruzado. Con este resultado, el partido se iba a la prórroga.

El Real Madrid pudo hacer el 1-2 a través de una falta que lanzó Kroos, aunque se topó con una parada espectacular de Mendy. Fue el Chelsea quien marcó el 0-3 en el minuto 62”, aunque el gol no subió al marcador por mano de Marcó Alonso, que la reventó a la escuadra tras un gran pase de Kanté.

El gol sí debió subir al marcador en esta ocasión, ya que es una mano que viene de un rebote y no le golpea con claridad. Sin embargo, el VAR avisó a Szymon Marciniak que ese gol tenía que ser anulado y finalmente así fue.

Replicó el Real Madrid con un cabezazo de Benzema que se marchó al larguero tras un gran centro de Mendy. Pero el drama llegó a falta de 15 minutos para el final, cuando Kovacic filtró un pase a Werner. El delantero alemán recortó con clase a Casemiro y Alaba dentro del área y batió por bajo a Courtois, que tocó el balón pero no impidió el gol. El Real Madrid estaba eliminado.

Dos minutos antes de la locura, pudo llegar un susto mayor. Minuto 78 y el Chelsea pudo rematar el partido y sentenciar la eliminatoria con un cabezazo de Havertz solo dentro del área que salvó Courtois con una auténtica parada.

Y cuando el Real Madrid estaba sobre la lona y el Bernabéu con cara de pocos amigos, llegó esos minutos finales que tantas alegrías nos ha dado este equipo. A falta de 10 minutos, Luka Modric frotó la lámpara de genio y con un gran pase con el exterior al segundo palo. El croata encontró a Rodrygo que consiguió empalmar el balón y marcar el 1-3 definitivo para mandar el partido a la prórroga. Imperial de nuevo el partido de Luka Modric. 

PRÓRROGA 

Los 30 minutos de la prórroga fueron otra historia e incluso el Real Madrid controló mejor el encuentro. Aun así, el Chelsea fue muy agresivo todo el tiempo y generaban sensación de peligro a todas horas.

Pero la pegada la tuvo el Real Madrid, que fue el equipo encargado de pegar el segundo zarpazo y desmoralizar a un Chelsea desgastado por el esfuerzo de los 90 minutos.

Error claro del equipo de Tuchel al sacar el balón que aprovechó Camavinga, uno de los mejores cuando salió en la segunda parte. El francés cedió a Vinicius, el brasileño entró solo por la banda izquierda para poner un centro claro a Benzema que remató solo de cabeza para poner el 2-3 y dar la clasificación momentánea al Real Madrid.

El equipo de Ancelotti tuvo muchos problemas en la prórroga, ya que en defensa el Real Madrid no tenía jugadores altos y el Chelsea hacía mucho daño a balón parado. Con cada córner, había miedo en el ambiente. A falta de 5 minutos para el final, Courtois volvió a ser el héroe tras una gran parada a un disparo de Ziyech que entró solo por la banda izquierda.

Incluso aviso de nuevo en dos ocasiones claras el Chelsea. La primera, con un cabezazo que se le fue fuera a Havertz por muy poco, tras un gran centro de Reece James. La segunda, un disparo de Ziyech, donde le cayó el balón al área a Jorginho y con su chut, se le fue por poco a la izquierda de la portería.

Drama pero final feliz. Agonía en el Real Madrid que se clasifica a las semifinales. Un partido donde el Chelsea fue muy superior pero incapaz de eliminar al trece veces campeón de Europa. Y sobre todo, felicitar al equipo inglés que hizo un grandísimo partido y fue mejor que el Real Madrid en los 90 minutos reglamentarios.

COLOFÓN

Fuerza y corazón. Un Real Madrid que se mete en las semifinales de la Champions League. Respira el equipo blanco. Euforia y mucho sufrimiento. Pero esto es Europa. Los billetes están caros para estar entre los 4 mejores equipos. Y más contra el actual campeón de esta competición. Que hoy se despide de la Champions con honor y demostrando porqué el año pasado levantó este trofeo tan deseado por muchos equipos. E incluso por muchos jugadores.

El Real Madrid sigue haciendo historia. Manchester City o Atlético de Madrid serán su rival. No será fácil el camino para llegar a la final de Paris el próximo 28 de mayo. Pero hoy toca disfrutar. Dormir tranquilos, porque ha sido un partido de mucha angustia.

Pero la vida es así. Nunca hay que darse por vencido. Cuando te dan por muerto siempre puedes resucitar. Si te caes al suelo, levántate. Cuando veas todo perdido, sigue hacia adelante.

Cuando te golpean, reacciona y golpea de nuevo. Porque cuando menos te lo esperas, llegan los éxitos. Con sacrificio. Orgullo, rabia y fe. La esperanza es lo último que se pierde. Y para acabar, cito una frase de una canción de un rapero llamado Piezas: “yo aprendí a rendir, no a rendirme”. Esto es el Real Madrid. ESTO, ES LA VIDA.

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