Radiografía Madridista | Raphaël Varane

La temporada de Raphaël Varane está siendo probablemente la más irregular que ha firmado desde su llegada al club en 2011. Una temporada dividida en 2 partes: una primera nefasta y una segunda notable. Luces y sombras del defensor galo en esta campaña, algo que se podría aplicar a gran parte de la plantilla. Y en su caso, como en el de muchos otros, ha tenido mucha influencia el Mundial disputado en Rusia el pasado verano.

Su inicio de temporada no auguraba cosas positivas, ya que su actuación en la final de la Supercopa de Europa fue realmente mala. Lopetegui le dejó en el banquillo en el estreno liguero ante el Getafe antes de volver al once titular en el partido ante el Girona. Su primer mes de campeonato liguero fue, eso sí, más que aceptable.

Los problemas para el francés llegaron a partir de la derrota ante el Sevilla en el Sánchez Pizjuán (3-0) en la que fue uno de los grandes señalados. Sus posteriores errores ante el Levante (falla en el despeje en un gol y comete el penalti del otro) y Barcelona en el Camp Nou (otro penalti cometido) terminaron por hacerle uno de los principales responsables de la mala marcha el equipo, destitución de Lopetegui incluida. Y para colmo de males, se lesionó en dicho partido ante el eterno rival.

Las cosas para Varane cambiaron con la llegada de Solari. Se recuperó de su lesión justo antes del partido ante el Eibar, que se saldó con una dolorosa derrota (3-0), pero su rendimiento fue a más a medida que pasaban los partidos. Se podría decir que empezó a alcanzar su mejor nivel llegado el Mundial de Clubes, en el que ganó su tercer trofeo del año. Las lesiones dejaron de acecharle y alcanzó la regularidad acorde a su estatus en el equipo. Durante el tramo de temporada en el que el Real Madrid se clasifica a las semifinales de Copa y logra su victoria más imponente en el Wanda Metropolitano (1-3), el rendimiento de Varane es altísimo.

Pero llegó la semana catastrófica para el Real Madrid y de nuevo Varane experimentó un pequeño bajón en su juego, aunque se podría decir que no fue ni mucho menos de los peores jugadores del equipo. En cuestión de una semana el Madrid perdía las semifinales de Copa ante el Barça, decía adiós al campeonato liguero al caer en un nuevo clásico ante el máximo rival y era eliminado por el Ajax en la Champions por un contundente 1-4. Varane estuvo desacertado en el partido ante los holandeses, pero sus actuaciones ante el Barcelona fueron aceptables.

En conclusión, no creo que la temporada de Varane sea para extraer muchas cosas positivas. A un jugador con sus condiciones (sobradamente demostradas en temporadas anteriores) hay que exigirle mayor regularidad. Su nivel durante la etapa de Lopetegui ensombrece en cierta medida su recuperación en los últimos meses. Pese a ello debería seguir siendo un jugador primordial de cara al futuro.

@JavierGomezT

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