Un solitario gol de Mbappé nos da la victoria en la encerrona del Coliseum.
Jornada 9 del Campeonato de Liga y el destino nos llevaba a un campo siempre complicado como es el Coliseum de Getafe.
El conjunto de Bordalás, duro en su juego y eterno competidor feroz, esperaba ansioso en casa la llegada del Real Madrid para dar el susto de su vida al conjunto blanco y fastidiarle la temporada.
Para la guerra de hoy, Xabi Alonso eligió a los siguientes 11 jugadores: Courtois; Carreras, Alaba, Militao, Valverde; Camavinga, Tchouaméni; Rodrygo, Bellingham, Mastantuono; Mbappé.
Por parte de los locales, el equipo titular fue el siguiente: David Soria; Diego Rico, Djené, Duarte, Iglesias, Femenía; Arambarri, Milla, Mario Martín; Liso, Álex Sancris.
Seamos sinceros, el partido fue un auténtico dolor de muelas. Un Madrid espeso apoyado en alguna ráfaga de talento, jugó durante gran parte del partido a lo que quiso el Getafe.
No ayudó que las combinaciones se intentasen una y otra vez por dentro, zona en la que el Getafe acumulaba hasta 10 jugadores, intentando obligar al Madrid a fallar pases a la hora de intentar abrir a bandas para así salir en velocidad y coger al equipo madridista en cueros a la contra.
Buena fe de esta estrategia dan la cantidad de despejes a la aventura que daban los jugadores getafenses en cuanto recuperaban el balón en defensa.
Otro factor a tener en cuenta en la pesadez del partido fueron las constantes interrupciones del juego. Entre las numerosas faltas del Getafe y que en cada balón parado se tiraban media hora para volver a reanudar el juego, era un agobio querer seguir viendo esto como espectadores.
Y que no mientan los aficionados getafenses que estoy seguro de que, más allá de estar contentos por simplemente competir, ellos también lo han pasado como un dolor de muelas durante cada segundo de partido.
Con esta situación de juego, estaba claro que el partido pedía a gritos un elemento que lo desequilibrara… y ahí apareció Vinícius Jr. como factor diferencial.
No fue suyo el gol de la victoria, pero sí fue quien abrió el camino para conseguir los 3 puntos. Desequilibrio, liderazgo y, sobre todo, dos expulsiones provocadas a un rival con muy poquita inteligencia.
La primera roja llegó al minuto 77, cuando Nyom que apenas llevaba 30 segundos de partido en el terreno de juego, se iba a por Vini sin balón y le tiraba el brazo y la pierna para frenar su carrera. Expulsión más que clara del lateral cuya ida de olla y cómo perjudicó tanto a su equipo merece ser estudiada.
Tres mminutos después, un Arda Güler que había entrado desde el banco, desestabilizó aún más el partido filtrando un pase letal hacia Mbappé. El francés recibía, se daba la vuelta y chutaba fuerte arriba, imposible para un David Soria al que se le doblaron las manos con el remate de Kylian.
0-1 al minuto 80 y con un jugador más, todo parecía estar bien… más aún cuando Álex Sancris demostró no ser tampoco demasiado listo y metió una patada por detrás a Vini teniendo tarjeta amarilla previamente, lo que le costó su expulsión.
No cambiaría el marcador de aquí al final, si bien el Getafe tuvo su ocasión de empatar el partido en botas de Kamara en el descuento pero fue desbaratada por un Courtois muy acertado.
Tiempo ahora para disfrutar el liderato, pensar en mejorar el juego y cargar pilas para batir a Juventus y Barcelona.
Los comentarios estan cerrados.