Sentimientos…
Desolada. Así me encuentro tras lo visto éste inicio de temporada.
20 de octubre y, si miro atrás, parece que el partido de la Roma fue un simple espejismo.
La temporada que no empezó mal, poco a poco ha ido perdiendo fuerza.
Te ves a una gran plantilla que se siente impotente. Jugadores (pilares importantes en el equipo blanco) que no están bien ni física ni mentalmente.
Un entrenador que, a mi parecer, pide al equipo algo que no pueden darle.
Hemos perdido contra el Sevilla (partido para olvidar), contra el CSKA, Alavés y Levante. Pena… siento pena.
Jamás sentiré vergüenza como tantas veces he leído en el maravilloso mundo de Twitter.
Pero miro hacia arriba y veo el escudo frente a mí, en mi habitación.
Ese escudo que, por más que me esté quitando vida, no puedo olvidar todo lo que me ha dado. Y me dicen que no mire atrás, que el pasado, pasado es.
Es imposible. Es imposible no mirar atrás. Es imposible levantarme mañana y no seguir confiando en éste equipo que tanta gloria nos ha dado. Es imposible dejar de querer, animar, apoyar a éste escudo.
Es imposible por la sencilla razón de que mi amor por estos colores es más grande que mi sufrimiento y mi dolor.
De peores situaciones hemos salido. Y sí, las épocas gloriosas se acaban.
Pero antes muerta que bajarme del barco. Porque si en las buenas te quiero, en las malas te amo.
¿No funciona así ésto del amor?
Los comentarios estan cerrados.