Crónica – Final 3º Partido | Real Madrid 81-66 FC Barcelona

Qué partido, que exhibición en defensa, que capacidad de sacrificio para ir a cada balón, a cada rebote. El Madrid gano en el Wizink 81-66 un partido clave para ganar la serie. Cada partido es importante, pero el tercero siempre marca la tendencia, ganando te asegurabas un quinto y perdiendo era verlo todo cuesta arriba. El Madrid ahogo al Barça en defensa y le hizo cometer muchas perdidas. También domino el rebote ofensivo (13-4) a pesar de volver a estar desacertado en el perímetro (6-24) las segundas oportunidades daban muchas opciones. 

En el Madrid Causeur y Hanga llevaron la voz cantante, mientras en el Barça eran Kuric y Calathes con bandejas los que encontraban el aro. Con Laprovittola totalmente anulado con la defensa de Taylor, el Barça hacía la goma como podía (21-16), pero el Madrid tenía más energía y contaban con la aportación de Llull (sobre todo en el tercer cuarto), la variante Exum no le dio resultado a Jasikevicius, se cargó de faltas muy rápido. En el segundo cuarto, errores tontos concedían al Barça tiros libres para seguir por debajo de los 10. De hecho, se pusieron muy cerca (25-24) tras 8 puntos de Kuric, también 2 acciones casi idénticas en las que Mirotic recibía debajo del aro y anotaba, les mantenían al acecho. 

Pero el Madrid siguió martilleando desde dentro y ya fuera con Yabusele o con Deck penetrando hacían mucho daño. Al descanso se iba el Madrid 7 arriba (46-39) tras 3 tiros libres de Davies. En la segunda parte el Madrid continuo igual, balón al poste y con dos canastas de Deck se iba la diferencia a +13(55-42) Pero el Barça se seguía aferrando al partido (55-50). A partir de ahí el Barça empezó a subir la presión defensiva y al Madrid a priori le incomodaban los ataques, pero Llull anoto un triple agotándose la posesión y en el siguiente ataque blanco Poirier anotaba tras perder momentáneamente el balón, también cuando se acababa el tiempo. 

Ahí el Barça pareció rendirse porque a base de rebotes ofensivos y un robo estuvo atacando casi un minuto seguido. Se llegaba al último cuarto con 13 arriba y en la reanudación se aumentó a +19(72-53) con un Jasikevicius que ya no sabía qué hacer. El partido ya no tenía historia, y Chus retiro entre otros a Yabusele que jugo más de 30 minutos y antes ya había quitado a Hanga, el Barça se llegó a poner a 12 faltando más de 3 minutos, pero la victoria no se escapó. De hecho, entro Ndiaye y anoto un canastón a la media vuelta. 

El Madrid mostro otra vez una gran superioridad ante el Barça como en el primer partido y demuestra que aquí no hay ninguna bestia negra. Con los dos equipos al límite físicamente, lo mal que lo lleva pasando el Madrid toda la temporada es una ventaja. Solo hace falta una victoria más. El título 22 de la era Laso espera. Se la merece, como el resto del equipo.