El Real Madrid remó hasta el final y murió en la orilla frente a un Barça que parece tener tomada la medida a los de Laso. El conjunto blanco jugó un partido mediocre hasta el último cuarto, cuando sacó la garra que solía caracterizar a este equipo. Llegó por delante a los últimos minutos, pero un tiro libre de Sanli mandó el partido a la prórroga y en el tiempo extra los de Jasikevicius fueron muy superiores. El resultado no es una buena noticia para el Madrid, pero sí lo es la sensación de que la energía de los blancos no está del todo acabada.
Los de Laso afrontaban este encuentro en el momento más turbulento de la temporada. Con Heurtel y Thompkins recién apartados del equipo, el Barça quería aprovechar para hacer leña del árbol caído. Aun así, de salida, el Real Madrid plantó cara, dispuesto a enfrentarse a los culés de tú a tú en el intercambio de canastas. Los blancos, sin embargo, solo aguantaron hasta el 6-6. A partir de ahí, el Barcelona aumentó la intensidad defensiva, colapsó la zona y empezó a obligar al Real Madrid a precipitarse, forzando pérdidas. Los de Jasikevicius llevaron el encuentro al 15-6 gracias a una antideportiva de Abalde para cortar un contragolpe local. El Madrid, cuya fragilidad mental se traduce últimamente con demasiada frecuencia en fragilidad defensiva, no parecía tener armas para responder. Los de Laso, al menos, consiguieron frenar la sangría. Un triple sobre la bocina de Abalde cerró el primer cuarto con 27-23.
La pequeña ventaja del Barça era la mejor noticia para el Real Madrid. Los de Laso regresaron al parqué con el chute de energía que suponía haber recortado una diferencia que llegó a ser mucho mayor. El equipo blanco aguantó el tipo y consiguió incluso ponerse un punto por delante (33-34) gracias a dos tiros libres de Tavares. La acumulación de faltas condicionó mucho el segundo período, pues, con un arranque muy intenso, ambos conjuntos entraron en bonus tras apenas tres minutos. El Barça trataba de dominar desde los ataques largos, en estático, mientras que el Real Madrid sabía que sus armas más peligrosas se encontraban en las transiciones rápidas. El liderato en el marcador fue alternando, sin que ningún equipo pudiera consolidar su ventaja, hasta los dos minutos finales, cuando el Barça volvió a pisar el acelerador. Así, el descanso llegó con 51-46 favorable a los culés.
Después de una primera parte con altísimos porcentajes de anotación, estaba por ver si el ritmo ofensivo podría mantenerse en la segunda. El Real Madrid regresó al parqué después del paso por vestuarios con una actitud más parecida a la del primer cuarto que a la del segundo, lo que permitió al Barça estirar su distancia hasta los 11 puntos (59-48) en cuatro minutos. Un Laprovittola en su línea ya habitual frente al Madrid hacía mucho daño a los blancos, que no encontraban antídoto para él. Solo una buena actuación de Yabusele en ataque permitía a los de Laso no distanciarse todavía más en el marcador. Sin embargo, el intercambio de canastas no servía al conjunto visitante para acercarse a la posibilidad de remontar. El tercer cuarto terminó con 71-65, sin que el Madrid pusiera en grandes apuros al Barcelona.
En el último cuarto, a pesar de un número muy pobre de tiros de tres, fue un triple de Llull el que puso el 73-72 en el marcador y dio esperanzas al Madrid. Jasikevicius frenó la mejoría blanca con un tiempo muerto y Sanli enfrió los ánimos con otro triple nada más regresar al parqué. Poco duró la tranquilidad para el Barça: un triple de Hanga puso al Madrid por delante después de muchos minutos (76-78). Entonces, un choque entre Abalde y Mirotic terminó con ambos expulsados. De cara al último minuto, podría haber sucedido cualquier cosa. Con 88-89, Nigel Hayes tuvo el triple definitivo para dar el partido al Barcelona, y lo falló; en la pelea por el rebote, los árbitros decretaron una falta rigurosa de Poirier sobre Sanli, pero este solo convirtió uno de los dos tiros libres. El 89-89, al final, envió el encuentro a la prórroga.
Nada más comenzar el tiempo extra, Hayes sí anotó el triple que antes había fallado. Quedaba mucho tiempo y, a estas alturas, ninguno de los dos equipos iba a dejar que el otro rompiera el encuentro. El Barça abrió la primera ventaja de la prórroga, pero el Real Madrid no quería volver a desengancharse del partido. Sin embargo, los triples empezaron a fallar a los de Laso, mientras que el equipo culé logró mantener muy altos sus porcentajes de tiro. A falta de un minuto, otro triple de Hayes, héroe del tiempo extra, puso el 105-97 y dejó el encuentro casi visto para sentencia. El marcador final se quedó en 108-97.
Con este resultado, el Real Madrid continuará en segunda posición en Liga ACB, con 19 victorias y 8 derrotas. La próxima semana, los de Laso afrontan doble jornada de campeonato doméstico: el miércoles 13 de abril visitan a Bilbao Basket (19:00 horas), y el domingo 17 reciben a Río Breogán (12:30 horas).
@_albacg
