Gran partido del equipo blanco, que ganó 80-68.
Victoria del Real Madrid en una emocionante final que provoca que el conjunto blanco se alce con el séptimo título consecutivo de uno de los torneos más importantes de las categorías de formación.
El encuentro comenzaba con el foco de atención puesto en el duelo entre Abdou Aziz Ndiaye y Bassala Bagayoko, seguramente los dos jugadores más destacados del torneo. En el equipo blanco, Adrián Bazaga y Kaya Mutambirwa ayudaban al senegalés para comenzar a distanciar a los madridistas en el marcador, que se ampliaba con una última canasta del combativo Álex Hernández al borde de la bocina que acababa con el primer cuarto (25-16).
En el segundo parcial, el acierto del Madrid disminuyó debido a algunas malas decisiones en ataque y a la muy buena defensa que proponía Iberostar Canarias. Las rotaciones en ambos equipos no lograban reducir ni incrementar la diferencia y llegaba el descanso con el 41-33 que ni mucho menos suponía el cierre del encuentro.
Fuente: realmadrid.com ![]()
Fuente: realmadrid.com
En la reanudación, el equipo de Alberto Muñoz se veía sorprendido por el buen hacer del conjunto rival liderado por Raúl Fariña y Bagayoko. El Madrid no terminaba de dar con la clave mientras los canarios reducían la distancia en el marcador.
Fue entonces cuando se produjo la entrada en escena de un jugador fundamental para la resolución del partido: Bruno Vidarte. A lo largo del torneo su aportación había sido buena pero sus minutos no eran demasiados, pues la presencia en el equipo de Mutambirwa y Bazaga era casi irremediable. En la final su situación fue diferente. Salió desde el banquillo para resolver un partido que se estaba empezando a complicar. Varias defensas excelentes, que le permitieron robar balones y capturar rebotes, y la consecución de 12 puntos en poco más de 10 minutos, ponían de nuevo al Madrid con una renta algo más tranquilizadora.
Aparecieron algunos destellos de calidad del capitán, Abel Delicado, el talentoso esloveno Jan Vide hizo gala de sus virtudes ofensivas, Mutambirwa iba de lado a lado de la cancha aportando acciones positivas y Ndiaye seguía dominando el rebote como un titán. El partido terminaba ahí. Fariña, Bagayoko o González hicieron todo lo posible por meter a su equipo en el marcador pero este acabó mostrando un 80-68 que ya es historia de esta competición.
Abdou Ndiaye terminaba el encuentro presentando su candidatura para MVP de la competición, el cual aún no se conoce, tras hacer 22 puntos, 20 rebotes y 32 de valoración. Tampoco se quedan muy atrás en las estadísticas Mutambirwa (11p, 9r), Bazaga (10p, 5r) o Vidarte (12p, 4r).
Se consuma así la séptima victoria final de la Minicopa del Infantil A del Real Madrid, lo cual responde al gran trabajo hecho por el entrenador, Alberto Muñoz, todo su cuerpo técnico y los encargados y responsables de la cantera que dirige con acierto Alberto Angulo.
Desde Eterno Campeón queremos mostrar nuestra felicitación a todos los que han participado de semejante éxito, así como al resto de equipos que han hecho de esta competición un título tan relevante para las canteras y, en especial, al Iberostar Canarias,que repetía como finalista y que ha contribuido a llevar a 3.000 personas al WiZink Center para ver un partido de infantiles gracias a su enorme talento.
Aquí termina la Minicopa 2019. ¡Hasta el año que viene!
