Febrero es un mes especial en muchos sentidos. Febrerillo el loco, le llaman algunos. Pues no en vano, es un mes en el que puedes morirte de frío al despertar y a media mañana pasear en mangas de camisa. Febrero es ese mes en que llega el día de los enamorados, nos regala imágenes de besos, abrazos y reencuentros que emocionan a cualquiera. Y digo yo ¿qué hay más emocionante y emotivo que el reencuentro del Real Madrid y la Champions? Pues ya me contesto y os contesto yo solo, nada.
En esta ocasión nos toca visitar a un enemigo intimo como es el Liverpool de Kloop. Nuestro rival de la última final de Champions, no esta pasando por su mejor momento, la verdad. Pero seguro que nos esta esperando con el cuchillo entre los dientes. Nosotros tras haber superado el bache post-mundial llegamos a la isla con la obligación de sacar un buen resultado que refrendar en la vuelta, en casa, en el Bernabeu. Llegamos con las bajas confirmadas de Touchameni y Kroos, por lo que Ancelotti, como confeso en rueda de prensa tiene un dilema. O jugar con tres en el medio o con tres arriba. Como el propio técnico italiano confesó, va a tener la duda hasta el último minuto.
Y por si acaso no teníamos suficientes motivos para buscar la victoria hoy en Anfield, hemos amanecido con una triste noticia. Nuestro presidente de honor, don Amancio Amaro, ha fallecido hoy a los ochenta y tres años de edad. Y sinceramente, no veo mejor escenario para honrar la memoria de uno de los mejores jugadores españoles de todos los tiempos. Así que ahora toca hacerle un último regalo a Amancio, una victoria que celebre en el cielo junto a sus amigos Gento y Di Stefano. Seguro que ese toque emotivo dará un plus a los nuestros.
Recordemos que, con la eliminación del valor doble de los goles en campo rival, no hay que perder la cabeza por un resultado. Es importante llegar a casa con un resultado positivo, pero no morir por hacer o no encajar un gol. Ya que casi todas las eliminatorias se resolverán en los partidos de vuelta.
Estoy convencido de que esta noche en Anfield pasará algo mágico. Se escuchará un Cañoncito (pum), veremos una Saeta sobrevolando el césped, empujada por el viento de la Galerna y a Amancio ayudando en el recorte final para que la pelota entre en la red.