En el Real Madrid además de un puñado de copas de Europa y de Ligas, hemos tenido diferentes plantillas que han recibido un apelativo que las describían, vivimos la época del Madrid de los “yeyé” que dominó el futbol en la década de los sesenta, disfrutamos en la competición local de la “Quinta del buitre” rompimos el molde con el Madrid de “Los Galácticos” juntando a las estrellas mas destacadas del firmamento futbolístico. Hemos soñado despiertos aun sin ponerle un nombre con el Madrid de Cristiano o también llamado “El de las cuatro de cinco” en honor a la gesta europea. Pues bien, hoy si algo saco en claro es que podemos estar ante el nacimiento de otra de esas generaciones que nos puede hacer levitar en el sofá “La quinta de los pajaritos”
Existe una generación que si se mima y se deja crecer con naturalidad puede darnos muchas alegrías, Fede Valverde, Rodrygo, Vinicius, Jovic o Brahim son ejemplos de esta generación que no solo van sobrados de calidad si no que además tienen claro que también hay que ayudar en defensa.
Se presentaba el Leganés en el Bernabéu tras vencer en casa al Mallorca y soñando con sacar algo del partido, pero todo se esfumaría rápido. A los siete minutos, una jugada de caracoleo de Hazard en el área pepinera terminaba con un centro al segundo palo de Marcelo al que llegaría Benzema para asistir al centro a Rodrygo que incrustado entre los dos centrales bate a Soriano a placer.
Casi no había terminado de dar la repetición del gol, cuando Benzema se internaba en el área y con un centro raso, asistía a Kroos para que el alemán hiciese su segundo gol en los últimos dos partidos, dos a cero en ocho minutos, partido finiquitado.
Pero el Madrid esta vez no volvería a cometer errores del pasado y seguría manteniendo una presión alta que ahogaba al Leganés y así llegaría el tercer tanto, un balón que intercepta Casemiro en el centro del campo y al mas puro estilo Modric, lanza un pase con el exterior del pie a Hazard que dribla a Soriano y es derribado, penalti. El portero adivina la intención de Ramos y despeja el balón, pero el VAR intervendría para que el lanzamiento se repitiese ya que Soriano tenía los dos pies por delante de la línea, el capitán repetía lanzamiento y esta vez si acertaba a hacer el tercero de la tarde.
El resto de la primera parte trascurrió entre caracoleos de Hazard que poco a poco se va encontrando a sí mismo y galopadas de Valverde que parece tener cuatro pulmones. El Leganés se quiso quitar un poco al Madrid de encima con un trallazo de Oscar que permitió a Courtois reencontrarse con la grada blanca con una gran parada que evitaba el gol. Valverde tuvo el cuarto en un pase de la muerte de Rodrygo pero se marcho alta y aun nos dio tiempo para ver a Benzema lanzar una falta antes del cuarenta y cinco.
Esperando los cambios y siendo sinceros, el bajón del equipo comenzaba la segunda parte, pero esta vez no hubo bajón, el Madrid le dio la pelota y el campo al Leganés y se dedico a buscar su momento, pero sin descuidar esa presión arriba.
Marcelo omnipresente en esta segunda parte hacia de esa banda izquierda un infierno para el Leganes combinando con Hazard, recuperaba un balón y asistia a Modric que había sustituido a Kroos, que es derribado y provoca el segundo penalti de la noche que se encargaría de transformar esta vez a la primera, Karim Benzema.
Saldría Karim del campo para dejar su puesto a Jovic, que marcaría pero en fuera de juego, gol anulado. Retiraba Zidane a Valverde para dar entrada a Isco, mas acertado que en Mallorca pero aun lejos de su mejor versión.
Ya en el tiempo de descuento tras una larga jugada, Carvajal ponía un centro medido para que Jovic inicie una cuenta goleadora con la camiseta del Real Madrid que seguro va a ser muy larga.
Gran partido de los de Zidane que vencen y convencen, segundo partido con portería a cero, los jugadores van cogiendo su mejor versión y hemos superado otro de nuestros gafes históricos, hemos ganado tras un parón. Ahora a pensar en el Betis que también venció y nos visitará con ganas de seguir creciendo.
Solo el tiempo dirá si esta generación de chicos pueden triunfar, pero desde luego si se les cuida y se les mantiene la mentalidad de ayudar y correr, solo ellos pondrán el techo a su carrera.
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