Es complicado escribir un artículo así y tengo que reconocer que durante el artículo he soltado alguna lagrimilla. Desde que supimos la noticia este lunes, todo el madridismo está triste, vacío y hasta enfadado con el Club porque se nos va una leyenda del Banquillo blanco.
Pablo Laso deja de ser nuestro pastor después de 11 temporadas en el banquillo blanco. Laso se va del Real Madrid siendo el entrenador con más partidos jugados 860 y se va como el segundo entrenador con más títulos en la historia del RM, 22 empatado con Lolo Sainz. Al aficionado duele la manera en la que el RM ha echado a Pablo Laso.
Pablo llegó en 2011 para devolver al RM a la cima del baloncesto europeo y se va dejándolo en ella y dejando una huella imborrable en la historia del RM. Durante estos 11 años ha tenido que competir contra equipos con mayores presupuestos y el RM de laso siempre ha luchado y ha dado la cara en cualquier competición que disputaba. Llegamos a 5 finales de la Euroliga, cosa que el club desde los años 90 no pisaba. Derrotamos y acabamos con la hegemonía del Barça de Xavi Pascual y acabamos muchos proyectos de varios equipos europeos. Laso ganó la 9ª y la 10ª Copa de Europa del club. Raro era no ver al RM levantar un título en cualquiera de las 11 temporadas de Laso.
Todos sabíamos que algún día tenía que llegar esta situación, pero nadie se esperaba que después de ganar una de las ligas más heroicas que yo recuerdo fuera acabar así.
Es verdad que Laso ha tenido el problema del infarto de miocardio, pero si tanto él como su cardiólogo se siente preparados para entrenar, no entiendo como el madrid decide que no. Bueno, si lo entiendo.
JCS lleva años soñando con este momento. En 2014, cuando el RM perdió la liga en el Palau, no hecho a laso, pero como si lo hiciera. En ese momento se decide cambiarle a sus ayudantes y dejar en entredicho el trabajo de Laso. Durante las siguientes temporadas los resultados acompañaban, pero cuando eso no pasaba siempre rondaba por las altas esferas el #LasoDimisión.
Durante años ha habido tiras y aflojas con los fichajes que hacían en la dirección deportiva. Pero fue durante esta temporada, en el mes de marzo, con la terrible crisis de resultados que tuvo el RM volvió otra vez a estar en el alambre el puesto de Pablo. En ese momento se calmó a JCS y se le hizo ver que no era lo ideal y que se espera al final de temporada. Pues llega el final de temporada, Laso lamentablemente recibe un nuevo varapalo con su infarto de Miocardio. El mundo del baloncesto se vuelca con laso y a los 2 días le vemos salir del hospital conduciendo. A los 5 días Laso vuelve a la dinámica de equipo y dirige los entrenamientos de la final. Laso no ha vuelto a dirigir al RM desde aquel partido ante Baskonia.
Acabada la temporada, pues en el día de ayer nos despertamos con la información de que el RM piensa en apartar a Laso del banquillo hasta marzo o abril del 2023. Laso tenía este lunes una revisión con el cardiólogo que le operó. Horas después de haber saltado la bomba de que Laso no sería el encargado de llevar al RM nos enteremos y así lo confirma Laso hoy en su Twitter que el médico le ha dado el ALTA y que puede entrenar a cualquier club profesional.
Ayer el club, aparte de despedir a Laso, también se carga al médico del primer equipo que dio validez al informe del Cardiólogo de Laso. Pero ya pasada la media tarde el RM comunica oficialmente lo que ya había filtrado y es que laso no va a entrenar al RM la temporada que viene.
Viendo las dos visiones ha quedado claro que a Laso lo echa del RM JCS, no por motivos médicos solamente. Detrás de todo esto hay una historia dónde JCS tenía ganas de que acabará con Laso fuera del RM. Para colmo en dicho comunicado, el RM no agradece a laso los servicios prestados hasta el día de hoy, cuando en el comunicado que dice que Chus Mateo se va a hacer cargo del equipo es dónde el RM agradece a Laso todos los años en el RM.
Una pena que esta situación no se haya llevado mejor por las dos partes, especialmente por la del club dónde JCS ha dejado la imagen del RM en una mala posición.
Así que Pablo, los aficionados te estaremos eternamente agradecidos por todo lo que has ganado, peleado y disfrutado con nosotros.
