El Análisis De Eterno Campeón | Real Madrid 88-95 Cazoo Baskonia
Tenemos un equipo sobrado de talento ofensivo, pero nos ha faltado carácter
Baskonia no ha jugado un gran partido en ataque, pero no hemos sabido defender el juego interior y hemos perdido demasiados balones. Esta vez no nos han matado desde el triple. La sensación es que nos ha faltado carácter. No la hemos metido cuando había que anotar y no hemos sabido imponer nuestra defensa en los instantes críticos. Chus se pasa el tiempo tratando de montar quintetos en los que se compensen las carencias defensivas de determinados jugadores. Es obvio que este equipo falla por el base, no tenemos al hombre capaz de agarrar el timón y guiar la nave cuando se vienen turbulencias.
Hay cosas que no se comprenden bien: Alberto Abalde necesita minutos en el 2 y más confianza, Petr Connelie lleva dos partidos sin saltar a la cancha y sin que se dé ninguna explicación, Eli John N’Diaye, tras un partido excelente, no ha entrado en ninguna de las tres convocatorias. Por otra parte, los +/- señalan a varios jugadores: Yabusele, Poirier, Causeur, Chacho y Abalde. Los últimos minutos, han sido un horror. A 2,38 íbamos un punto arriba y hemos encajado un 2-10. Sí, es cierto que el arbitraje nos sacó de quicio. En todo eso se ve que nos ha faltado carácter. El cinco inicial y el que hubo en pista en el último cuarto, hasta la expulsión de Tavares, funcionaron bien.
Veamos que nos cuentan los números.
Análisis de la anotación
Hemos perdido la posesión y ahí ha estado la explicación cuantitativa de la derrota. A pesar de todo, hemos anotado más puntos por posesión finalizada que Baskonia. Pero el equipo vitoriano terminó con lanzamientos 6,5 posesiones más, que se han traducido en los 7 puntos de diferencia con los que terminó el encuentro. El Real Madrid consiguió 1,0864 puntos por posesión finalizada, frente a 1,0857 del equipo vasco. Es decir, 0,0007 puntos más por posesión finalizada, que no permiten establecer diferencias apreciables.
Análisis de la posesión
Partido muy rápido, donde ambos equipos han jugado a correr: 98/98,5 posesiones totales; esa pequeña diferencia de 0,5 se debe a la técnica que le cae al equipo blanco en cada partido. Es cierto que Baskonia cogió un rebote más en ataque. El problema principal gira alrededor de los 6 balones más que perdió el Real Madrid: 17 balones (el 17,35% de sus posesiones), por 11 del rival (el 11,17% de las posesiones totales). El equipo blanco cuida mal el balón. Es lógico, porque una de sus carencias principales está en el base, por un lado y por otro, debido a las muchas faltas en ataque que nos señalan. Pero este es uno de los puntos débiles que aparecen de forma recurrente, partido tras partido, y, a mi entender, no sobreponerse a esta reiteración en los momentos críticos también indica que nos ha faltado carácter.
Análisis del rebote
Se han producido 43 rebotes en el aro del Real Madrid por 39 en el aro de Baskonia, principalmente por esas 6 posesiones más que ha finalizado el equipo vasco. Pero vamos a hacer el análisis con el gráfico de porcentajes.
Ambos equipos cerraron de forma muy similar el rebote defensivo, estuvieron muy correctos en esta faceta. Las diferencias en los números totales se han debido a esos 4 rebotes más en el aro del Real Madrid. Si el equipo blanco no hubiese tenido esas seis pérdidas adicionales, el número de rebotes en defensa y ataque de ambos equipos habría sido el mismo.
El tiro
Los dos aspectos más importantes a resaltar son :
- Baskonia estuvo muy mal en el triple, o bien, el Real Madrid ha aprendido a defender mejor esta faceta. Esto no tuvo un gran impacto en el partido porque el equipo blanco no lo hizo mucho mejor.
- Baskonia le ha ganado el juego interior al Real Madrid, sobre todo, ha dejado en evidencia su defensa.
El tiro libre
El equipo blanco finalizó 14 posesiones como tiros libres (el 17,28% de las finalizadas), anotó 22 lanzamientos, con el 78,57% de acierto que equivale a 1,5714 puntos por posesión. Baskonia dispuso de 12,5 posesiones (el 14,29% de las finalizadas), logró anotar 18 lanzamientos, con el 72% de acierto, que se tradujo en 1,4400 puntos por posesión. El conjunto blanco provocó más personales de tiro y fué más eficaz en la ejecución de los lanzamientos.
El tiro de campo
El equipo madrileño lanzó el 82,72% de sus posesiones finalizadas como tiros de campo y consiguió 0,9851 puntos por lanzamiento (una eficiencia baja). Baskonia lo intentó el 85,71% de sus posesiones finalizadas y obtuvo 1,0267 puntos por lanzamiento. Logró 0,0416 puntos más por tiro de campo. Lo que ha supuesto 3 puntos más.
Los vitorianos consiguieron esa ventaja en la superioridad demostrada en el juego interior, algo inaudito en los partidos jugados hasta ahora. El Real Madrid lanzó de 2 el 59,7% de sus tiros de campo y obtuvo 1,0500 puntos por lanzamiento (52,5% de eficacia). Los vitorianos se jugaron el 65,33% de sus tiros de campo, lo que fue un acierto, dado el mal porcentaje logrado enel triple, y obtuvieron 1,1429 puntos por lanzamiento (57,14% de eficiencia).
La eficacia en el tiro de tres de ambos equipos fue muy pobre, pero tuvo menos importancia en el caso del equipo vasco, porque concentró su ataque en el juego interior. Los blancos se jugaron el 40,30% de sus tiros de campo y obtuvo 0,8889 puntos por lanzamiento (un lamentable 29,63%). Baskonia se jugó el 34,67% de sus tiros de campo y obtuvo 0,8077 puntos por lanzamiento (paupérrimo 26,92% de eficacia).
Conclusiones
Partido perdido en la posesión, en partuicular, en el poco cuidado del equipo blanco por la conservación del balón. Otra vez hemos tenido demasiadas pérdidas, 6 más que nuestro rival. Las causas son tres: por un lado, no tener un base confiable, por otro, poca concentración en el pase y, finalmente, demasiadas personales en ataque.
Hoy ha sido un mal día de nuestro rival en el tiro de tres, o bien lo hemos defendido más eficazmente, pero hemos perdido la batalla del juego interior. Hemos encajado altos porcentajes y hemos estado simplemente discretos en ataque.
Pero , lo peor, ha sido que nos ha faltado carácter. No hemos sabido reaccionar cuando era necesario. Ni hemos conservado el balón, ni hemos apretado en defensa, ni hemos acertado en ataque, ni nos hemos comido el rebote en ambos aros. El seguidor del Real Madrid no está acostumbrado a esta situación.
El quinteto del primer cuarto y el del último hasta la expulsión de Tavares por cinco personales, parecían capaces de dominar al rival y ganar el partido. Al final, no pudo ser.