Empate en el derby liguero tras un discutido penalty de Tchouaméni y otro gol de Mbappé para rescatar un punto.
Jornada 23 del Campeonato de Liga y este sábado noche era de las fechas especiales. Tocaba derby, se venía calentando bastante esta semana y el partido no defraudó en cuanto a tensión, aunque quizá sí en lo referido al juego.
El conjunto de Carlo Ancelotti salía con la necesidad de mantener su liderato e intentar aumentar la ventaja frente a su rival de esta noche, situado a un punto en la clasificación.
Los 11 titulares elegidos fueron los siguientes: Courtois; Fran García, Asencio, Tchouaméni, Lucas Vázquez; Ceballos, Valverde; Vinícius, Bellingham, Rodrygo; Mbappé.
Antes de nada, hay que referenciar lo ocurrido antes de comenzar el partido y ponerse de pie ya que nuestro querido Marcelo, que recientemente anunció su retirada del fútbol, era homenajeado por todo el estadio Santiago Bernabéu el cual le dedicó una sonora y merecidísima ovación. Además, Luka Modric le regaló una camiseta conmemorativa que Marcelo recibió emocionado junto a sus hijos. Leyendaza el lateral izquierdo que tanta gloria nos dio.
Como decimos, el partido no fue el más ameno de ver en cuanto al juego y, una vez más, el Real Madrid volvió a acusar el no realizar unos 45 primeros minutos adecuadamente. La falta de soluciones en ataque, la lentitud en el ritmo de juego y el intentar una y otra vez las mismas jugadas solo provocaba que el ataque blanco chocase de manera continua contra la poblada defensa rojiblanca.
El Atlético de Madrid, por su parte, defendía con los 11 jugadores casi a la altura de su propia frontal del área e intentaba buscar las cosquillas a la espalda de Asencio, muy acertado al corte durante todo el encuentro, y Tchouaméni, que volvería una noche más a ser protagonista negativo.
Nos detenemos aquí, puesto que hay mucha división de opiniones en cuanto a la jugada donde falló el jugador francés. Una internada del Atlético por la banda de Lucas Vázquez terminó en un centro al área que buscarían Tchouaméni y Samuel Lino, con el resultado de un pisotón del francés al jugador rojiblanco.
Hasta aquí el hecho y ahora entramos en la interpretación, pues el balón se paseó por delante de ambos y el contacto se produjo justo después, lo que significaría que no habría posibilidad de seguir la jugada. También parece por algunas imágenes que Tchouaméni no llega a apoyar del todo el pie, con lo cual no podría pisar del todo al rival. Otras tomas sí parecen mostrar que el pisotón existió de manera clara. Jugada muy, muy complicada para Soto Grado y el VAR.
Sea como fuere, Julián Álvarez transformaba la pena máxima disparando al centro y hacía el 0-1.
Ya en la segunda parte, el Madrid parecía reaccionar y comenzaría a generar peligro, sobre todo en botas de Vinícius que hasta el momento no había aparecido pero tuvo dos ocasiones claras que Oblak despejó a corner.
Esta reacción se vio recompensada con el gol del empate a 1 al minuto 50. Rodrygo se colaba muy bien entre varios defensas y conseguía sacar el centro al punto de penalty donde Bellingham remataba y se encontraba con la pierna de un defensa, cuyo rechace era aprovechado por Mbappé para marcar a placer.
Quedaba mucho y el Madrid no dejaría de intentarlo siendo un cabezazo de Bellingham al larguero, justo tras el empate, la más clara para haber podido hacer el 2-1.
Pero la suerte no estaba con nosotros y ni siquiera las entradas de Camavinga y Modric para refrescar el medio le dieron al Madrid el punch que necesitaba para acabar llevándose la victoria. Tampoco ayudó que un jugador como Brahim, que venía de hacer partidazo en Copa y te puede aportar mucho en ataque, saliese del banquillo cuando apenas quedaban 3 minutos de partido (6 si contamos el descuento).
Pero en fin, no fue el día hoy y al menos se minimizó el daño manteniendo el liderato. Toca olvidarse de esto, aprender de los muchos errores y confiar en que el equipo estará mejor el martes para la guerra en Manchester, pero eso ya es historia para otro momento.
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