Victoria sufrida para mantener vivas las esperanzas de clasificación europeas.
Partido muy importante para los intereses del Real Madrid el que tocaba disputar esta noche en Bérgamo contra el Atalanta. El conjunto italiano, que ya fue rival nuestro en la final de la Supercopa de Europa este pasado verano, venía en un gran momento de forma colocado como 5° clasificado en Champions y asentado en el liderato del Calcio italiano.
El Madrid, por su parte, buscaba una victoria que le aupara a puestos superiores que espantasen los fantasmas de una eliminación europea que dolería mucho. Para lograr el objetivo, Carlo Ancelotti eligió a los siguientes 11 soldados: Courtois; Fran García, Tchouaméni, Rüdiger, Lucas Vázquez; Ceballos, Valverde; Vini, Brahim, Bellingham; Mbappé.
El inicio del partido fue algo distinto a los anteriores partidos, siendo el Madrid quien intentase presionar arriba y controlar el partido intentando llevar el pulso del juego. Aprovecharía así el conjunto blanco los espacios a la espalda que dejaba la adelantada defensa del Atalanta, quien sufría la desventaja de ir a morder arriba en cuanto llovían los balones largos a espaldas de los centrales.
No hubo que esperar mucho a que ese atrevimiento fuese castigado y así, al minuto 10, un buen balón filtrado de Brahim para Mbappé era perfectamente recibido por el francés quien se deshizo de su par con un gran control orientado y fusiló a la red para hacer el primer gol del partido. Sería el segundo gol de Kylian en Champions con la camiseta blanca y su número 50 en total en la competición.
A partir del gol, la primera parte estuvo bien controlada por el Madrid… hasta que, cómo no, el infortunio habitual volvió a cebarse con los nuestros. Primero, en forma de lesión de Kylian Mbappé quien abandonaba el campo con molestias musculares y cara de circunstancias. Habrá que estar atento al alcance de la lesión, pero el francés vería el resto de la primera mitad en vestuarios y la segunda en el banquillo. Entraría Rodrygo en su lugar, aunque el brasileño no tuvo hoy su mejor día.
El infortunio continuó y antes del descanso, una internada en el área de Kolasinac era cortada por una torpeza de Tchouaméni metiendo la pierna donde no debía y derribando al rival. Marciniak no dudó y señaló pena máxima, que sería anotada por De Ketelaere para hacer el 1-1.
increíble cómo se puede complicar un partido casi controlado completamente, sabiendo que justo antes del gol, Rüdiger tuvo una muy buena ocasión para el 0-2 y casi cerrar el partido pero la bola no quiso entrar.
Sería en la segunda parte cuando el Real Madrid diese un golpe en la mesa y sonríese la suerte a favor nuestro. De esta manera, un mal rechace de la defensa del Atalanta le caería a Vini quien dispararía rápido y cruzado para anotar el 1-2.
Tres minutos después, un magnífico pase de Vini encontraría a Bellingham quien controlaría, encararía y rompería a De Roon para cruzar el balón y hacer el 1-3.
Parecía sentenciarse, ahora sí, el partido y que el Madrid se llevaría los 3 puntos sin mucha más complicaciones. Pero el Atalanta quiso dar guerra hasta el final y una gran jugada personal de Lookman, jugador de muy alta calidad, batía a Courtois por su palo y ponía picante al final con el 2-3, que a la postre sería definitivo. No estaba haciendo mucho el crack inglés nacionalizado nigeriano, pero ya sabemos lo poco que necesitan los buenos para hacer daño.
Tras el gol, el Madrid se vino abajo sin los cambios dando un verdadero resultado positivo y ahí la Atalanta aprovechó para hacer daño ya que sus reemplazos sí surtieron el efecto que buscaban, e incluso pudieron empatar en la última jugada del partido tras un gran centro de Lookman que Retegui mandaría arriba totalmente solo y en boca de gol.
Pero no hubo tiempo par más y los 3 puntos eran propiedad del Real Madrid. Quedan 2 encuentros de Champions pero ahora hay una visita importante a Vallecas que merece toda nuestra atención. Campo complicado en momento complicado, veremos a ver si, ojalá, se puede celebrar una nueva victoria madridista.
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