Hoy nos hemos levantado y ya no estabas, supongo que la vida sigue y a todos los que aprendimos a quererte solo nos queda recordar los buenos momentos que vivimos juntos y pensar que pudimos mejorar para evitar que te fueras.
Sé que la decisión fue tuya y solo tuya, que cuando tomas una decisión ya no hay marcha atrás y todo eso solo hace que me torture pensado que fuimos nosotros los que te empujamos a tomarla.
Fuimos nosotros una afición exigente en exceso que con nuestros pitos y desprecios no supimos entender que eso de ganar no solo dependía de ti. Nosotros, unos jugadores en ocasiones acomodados que perdimos ese gen de luchar hasta el final y tiramos la Liga y la Copa mucho antes de lo que este escudo lo merece y jugamos con la salud de miles de aficionados en varios partidos de Champions. Nosotros, una directiva muchas veces cegada por nuestros propios intereses mas allá de lo deportivo, imponiendo fichajes, altas, bajas o pretemporadas absurdas en lejanos países, porque el marketing así lo requiere. Nosotros, una prensa obcecada en hacer daño al Madrid que no valoramos tus méritos, ni le dimos importancia a ninguno de tus logros porque preferimos ensalzar a otros entrenadores que aun logrando la mitad que tú, sí nos dan bola.
Se nos sigue encogiendo el corazón cuando vemos la cara de Florentino en tu rueda de prensa, pero todavía se nos encoge más cuando vemos tu rostro firme y decidido, mostrando que la decisión no fue fruto de un calentón, sino que la sopesaste y viste que era lo mejor, que te duele tanto o más que a nosotros, porque nunca es fácil separarte del amor de tu vida, sea por el motivo que sea.
Gracias Zizou, gracias por tu paciencia, por tu ironía, por esa eterna sonrisa con la que eras capaz de capear el temporal más grande que imaginásemos, gracias por hacer que tu leyenda sea parte de nuestro club, gracias por darnos la mano para entrar en la historia juntos, porque jamás podría imaginar mejor compañero de viaje.
Esperamos que desde el minuto uno te vaya todo bien, que pienses en nosotros y nunca estés lejos del Real Madrid, porque solo podemos negarte una cosa y es decirte adiós, ni podemos ni queremos, así que una vez más, gracias y hasta pronto.