El Real Madrid jugará este sábado la final del Mundial de Clubes contra el Gremio brasileño en Abu Dabi, tras ganar el miércoles la semifinal ante el Al Jazira por dos goles a uno; en un partido poco brillante aunque con un dominio total y con la superioridad esperada con 36 remates, 14 tiros a puerta y 4 palos.
Es difícil explicar como no acabó en una goleada de escándalo y sin embargo tuvo que remontar el tanto local y conseguir el gol de la victoria en el minuto ochenta y uno.
Este partido fue especial para dos jugadores: Marco Asensio y el canterano Achraf que debutaban en la competición. Asensio el año pasado no disputó ni un solo minuto en el Mundial de Clubes disputado en Japón. El mallorquín entró ayer al campo en el minuto 68 y no logró marcar, y es que hasta la fecha había marcado en todos los debuts en el resto de competiciones disputadas. Esta temporada ya ha marcado siete goles; cuatro en la Liga, uno en la Copa del Rey y dos en la Supercopa de Europa.
Diferente fue el debut de Achraf Hakimi. El marroquí salió de titular y no tuvo su mejor tarde. Sufrió para detener el poco ataque del Al Jazira. El gol del equipo local llegó por su banda tras cruzarse para robar el balón, en el gol anulado se queda cerrando y mide mal la entrada al contrario y el rival aprovecha para plantarse solo delante de la portería de Keylor Navas. Zidane le conoce bien, tiene plena confianza en el lateral y seguirá dándole minutos esta temporada.
El Real Madrid tendrá el sábado la posibilidad de conseguir su quinto título del año 2017 y así revalidar el título de campeón del Mundial de Clubes, y convertirse en el primer club en conseguirlo de manera consecutiva.
JM Durba. @93Madridista
