El pasado 5 de febrero Cristiano Ronaldo cumplía 33 años. Para muchos, la temporada del astro portugués en lo que a competición liguera se refiere, está siendo una de las peores desde que llegara a Chamartín en el verano de 2009, apenas 8 dianas en las 17 jornadas que llevábamos de competición. Sin duda unos números muy pobres para lo que el jugador portugués nos tiene acostumbrados.
Recordar que en la competición europea es el máximo artillero, con 9 dianas en seis partidos, además de haber marcado en todas las jornadas de la fase de grupos. Pero en Liga no está teniendo la misma suerte de cara al gol…
Todo hasta este pasado sábado, donde Cristiano volvió a demostrar el gran depredador de área que es. Hizo 3 tantos, un hat-trick perfecto, ya que anotó de cabeza, con la derecha e izquierda, y otro disparo que se estrelló en el palo. Es el octavo hat-trick perfecto que logra en su carrera. La primera parte del Real Madrid el sábado frente a la Real Sociedad fue abrumadora, desde el minuto 1 con el testarazo imperial de Lucas Vázquez.
Un festival al que Cristiano Ronaldo no quiso faltar y dejar su mejor sello, sus goles y su hambre; un regalo perfecto para celebrar su 33º cumpleaños y para volver a coger tono para la competición más importante para el Real Madrid, la Champions. Y es que el próximo miércoles, el Madrid se enfrenta al examen más importante de la temporada, pues con una Liga perdida, donde el líder le saca 17* puntos, eliminados de la Copa del Rey en casa y por el Leganés; al conjunto de Zidane solo le queda pensar en Europa y agarrarse a la competición como un clavo ardiendo para poder maquillar un poco esta ruleta de temporada a la que por ahora nos tienen acostumbrados. Y para todo ello, el Madrid y el madridismo necesitan recuperar la mejor versión de su jugador estrella, Cristiano Ronaldo.