El Real Madrid pasa a la final de la Euroliga tumbando al Barça en la semifinal por segunda vez consecutiva (66-78)
Si alguien te dice después de la derrota en el segundo partido de la serie de Playoffs contra el Partizán que el Madrid iba a remontar la eliminatoria y ganar al Barça en la semifinal no te lo hubieras creído, pero esto es el Real Madrid, el mejor equipo de Europa, el que nunca se rinde, el que no da un partido por perdido.
Antes del partido de hoy, todos daban por favorito al Barça, ya que llegaban sin ninguna baja y en el mejor momento de forma de toda la temporada, mientras que el Real Madrid, sí que es verdad que llegaba en un buen momento de confianza tras la épica remontada de la serie de Playoffs, pero arrastraba las importantes bajas de Gabriel Deck (lesión), Vincent Poirier (lesión) y Guerschon Yabusele (sanción), además de Carlos Alocén (lesión) y Petr Cornelie (decisión técnica). Esto suponía un juego interior muy reducido: Tavares, Ndiaye y Randolph, teniendo que jugar Mario Hezonja al 4.
El Madrid salió a pista con Williams-Goss, Musa, Hanga, Ndiaye y Tavares, mientras que el Barça lo hizo con Satoransky, Laprovittola, Abrines, Mirotic, Sanli. La idea de Chus con este quinteto era la de encontrar un equilibrio entre ataque y defensa, saliendo con Musa como principal anotador, Williams-Goss y Hanga para neutralizar a los exteriores del Barça y Ndiaye para secar a Nikola Mirotic. Con todo esto el primer cuarto estuvo bastante igualado, buenas acciones de Williams-Goss y Tavares protagonizaron los ataques blancos, además una buena actuación de Ndiaye cumpliendo con el objetivo inicial de frenar a Mirotic.
Al inicio del segundo cuarto, Chus apostó por dar un breve descanso a Tavares usando a Randolph en el puesto de 5. La ausencia del caboverdiano se notó en los pocos minutos que estuvo en el banquillo y el Barça hizo daño pudiendo ser más verticales al aro que antes. A todo esto se sumó el gran acierto que tuvieron los catalanes desde la línea de 3 que les permitió poner una ventaja de hasta 9 puntos en el electrónico, que más tarde se redujo a 6 puntos gracias al triplazo de Llull sobre la bocina previo al descanso.
Daba la sensación de que los culés tenían controlado el partido al descanso y que si todo iba bien podían conseguir la victoria. Sin embargo, como ya decía antes, el Madrid nunca se rinde. Los Blancos salieron tras el descanso motivado, con una buena defensa que bajó el porcentaje de acierto que tuvo el Barcelona en la primera parte y con Tavares como referencia en el ataque, logrando colocarse tres arriba en el marcador al término del 3º periodo.
En el último cuarto apareció otra vez el “Chacho” Rodríguez. Ya lo hizo en el último partido de la serie contra el Partizán con una actuación magistral y determinante, y lo ha vuelto a hacer hoy. Sergio dominó por completo el ataque del Real Madrid dando una “master class” de cómo jugar el Pick and Roll con Edy Tavares, anotando importantes canastas y repartiendo asistencias a otros jugadores como Tavares. Y es que el caboverdiano ha sido el MVP del partido con una actuación histórica: 20 puntos, 15 rebotes, 4 tapones, 39 de valoración, demostrando que es el mejor jugador de Europa actualmente.
En el conjunto azulgrana, su estrella: Nikola Mirotic ha tenido un partido pésimo con un -2 de valoración y no ha aportado nada a su equipo en el día más importante de la temporada. El domingo se disputa el tercer y cuarto puesto entre Mónaco y FC Barcelona (a las 16:00 hora española) y la final entre Olympiacos y Real Madrid (a las 19:00 hora española).
Toca ver si los de Chus Mateo son capaces de culminar el trabajo y conseguir la úndecima copa de Europa.