Aquí estamos otro lunes más, un lunes lluvioso y gris en gran parte de España, casi como se quedo el sábado tras el partido contra el Valladolid, pero vamos por partes porque esta semana trajo de todo.
Viviendo entre rumores de idas y venidas de un brasileño tatuado y un holandés repeinado, de lo que hace falta apuntalar y de como arreglar un club que es ejemplo de gestión, la única realidad es que dijimos hasta pronto, que no adiós, a Take Kubo, que se fue cedido al Valladolid, ah no perdón que hasta Pedrerol mete la gamba de vez en cuando, el japones ha sido cedido una temporada al Mallorca de Vicente Moreno.
Y en esas estábamos cuando llegó el sábado y esperábamos a un Valladolid que venía de ganar al Betis y que el año pasado ya nos hizo pasar las de Caín en el Bernabéu. La sorpresa saltaba una hora antes del encuentro ¡James titular ¡El colombiano volvía al once acompañado de Isco y Vinicius al banco, Zidane volvía a probar el 4231 con el cafetero, Isco y Bale en esa línea de 3 y Karin en punta y no le fue mal! El primer tiempo fue un monologo blanco, donde si es cierto que en ciertas fases faltó un punto de velocidad en algunas fases del partido donde se perdieron opciones de contrataque, pero en líneas generales, los de Sergio, no asomaron por el área de Courtois. De lo mejor de estos primeros compases fue el propio James y un Bale que parece recuperar las ganas de triunfar en el Madrid, en su Madrid. Isco como siempre muy criticado, tuvo media hora muy buena hasta que empezó a gustarse y abuso en exceso de la conducción de la pelota, pero como digo, cuarenta y cinco minutos de dominio blanco.
En la segunda parte, con la búsqueda desesperada de un gol que no llegaba, lo que se logró fue un despelote táctico donde el centro del campo quedo prácticamente despoblado en beneficio del ataque y llegó el ansiado tanto, obra como no de Benzema que sigue callando bocas. Desde ahí, todo mal, mal y tarde Zidane que tarda en recolocar al equipo, mal los jugadores que no supieron mantener la calma a falta de 10 minutos, mal, muy mal Carvajal en el gol que pierde por completo la posición, mal Kroos y Bale perdiendo un balón comprometido, mal Courtois que pese a ser un mano a mano, sale tarde, mal el Madrid… Y empate de un Valladolid que ve como el fútbol le premia por un partido donde cometieron muy pocos errores y que, pese a no generar ocasiones claras, nunca perdió la fe.
Este es nuestro Madrid, capaz de lo mejor y lo peor en apenas 5 minutos, ahora queda otra semana llena de rumores de fichajes, alentados por un empate, pero sobre todo una semana donde la misma afición que se veía en la diosa Cibeles, ahora reza por poder acabar entre los 3 primeros para entrar en Champions.
Por su parte los chicos de Raúl, que debutaban en las Rozas, sacaron un empate a uno imitando a los mayores, con un gol de Jordi en el 54 y las chicas del Tacón tuvieron un amistoso en el que se enfrentaron al Sevilla y pese a mostrar un buen nivel durante todo el encuentro, al mas puro estilo Sergio Ramos, las sevillistas se llevaron la victoria tras rematar un córner en las postrimerías del encuentro. Menos mal que no jugó la sección de baloncesto y perdió, porque estaríamos apunto de cerrar el club.