Noche de boxeo en Eibar, a la derecha con calzón blanco y rosa Zidenine Zidane a la izquierda de Rojo y azul Mendilibar. El francés y su equipo que llegan sumando cuatro victorias consecutivas, algunas luciendo y otras sufriendo. El Vizcaino de cinco partidos sin perder.
Empezaba el combate con los dos púgiles agiles, el Madrid moviendo el balón a una velocidad estratosférica, el Eibar corriendo a la presión cual guepardo acechando a su presa. El primer “crochet” sería vasco, pero flojo, lejano, lo ataja bien Courtois. En el minuto seis Benzema lanzaba un directo en el área pequeña tras recibir una magnífica asistencia de Rodrygo. El Eibar no caía a la lona, pero si el balón a la red y se ponía el cero a uno en el marcador. Tanto se gusto el francés que siete minutos después tras un recorte con el cuerpo asistía a Modric para que el croata asestara un gancho que tiraba “patas pa´riba” el planteamiento armero. Cero dos en apenas trece minutos y por las sensaciones parecía mas posible el cero a tres que el uno a dos.
Tanto era así que con el Eibar tambaleándose y buscando el abrazo para sostenerse, Benzema tuvo el tercero de cabeza en una jugada que te la firman los Globetrotters. Viendo la situación y tal vez mas conscientes de sus limitaciones que de sus defectos, el Madrid rebajo la tensión y dejo al herido coger aire. Los vascos se fueron reponiendo poco a poco y subieron las líneas de presión nuevamente, lo que propició la recuperación de varios balones. En uno de esos balones Kike ve adelantado a Courtois y con un precioso disparo con rosca ponía el uno a dos. Buen derechazo de los armeros que hacían reaccionar al púgil blanco, que llevaba varios minutos bailando por el ring sin lanzar un golpe.
Primero Benzema con un golpe sutil pero letal al estómago ponía el tercero, pero lo anularon por fuera de juego. Luego golpe al aire de Lucas que no llega para remachar un centro cruzado de Mendy. Entre ataque y ataque blanco Muto tuvo ocasión de golpear, pero se le marcha alta tras un centro de Bryan Gil. El Madrid volaba como una mariposa y picaba como un mosquito, porque hacía daño, pero no mucho. Una falta al borde del área cobrada por Ramos y una contra que termina Lucas casi sobre la bocina, nos dejaban todo servido para una segunda parte que se presentaba memorable.
Comenzaba el segundo asalto asalto como acabo el primero, con los de blanco lanzado golpes que no dañaban a los locales. Primero Benzema en fuera de juego y luego Rodrygo lanzaron ataques que eran bien bloqueados. En la única en que olvidamos cubrirnos nosotros, Ramos le regala un balón en la frontal a Inui que cruza en exceso, nos libramos de un gancho que nos podía haber tirado en el minuto cincuenta y siete.
De ahí al final intercambio de golpes cuando las defensas flojeaban y mucho abrazo en el centro del ring. Primero un golpe que pudo ser definitivo. Rodrygo en el área tras asistencia a lo Laudrup de Kroos, pero Dimitrovic despeja bien. Luego Muto en un cabezazo cruzado que nos hizo dar un paso atrás antes de volver al ataque. Asensio tuvo su oportunidad de mandar un cruzado en una falta que salió cerca. Y Vigas tuvo el empate en el noventa y uno desde el borde del área chica, pero se cruzo Ramos para evitar un directo al rostro.
Con el combate languideciendo, nos quedaba tiempo para ver un uppercut de justicia, la que hacía el futbol con Lucas Vázquez. El gallego llevaba varios partidos mereciendo el gol y por fin llego. Con el golpe del de Curtis, los vascos no se levantaron tras la cuenta de diez.
Partido intensísimo en Ipurua donde probablemente los dos equipos merecieron más, a nadie le hubiera extrañado hoy ver un tres a cinco. Solo podemos dar las gracias a los dos contendientes por el esfuerzo y la entrega que han demostrado en los noventa y cinco minutos. Ambos equipos pudieron golpear mas y mas duro, pero el K.O fue blanco que también hubiera ganado a los puntos.