A lo largo de una temporada irregular en la que el Real Madrid ha dejado más dudas que certezas, es verdad que no todas las versiones del equipo blanco han resultados ser negativas. De hecho, esta irregularidad no ha sido solo en cuanto a resultados, sino también ha supuesto una constante montaña rusa de sensaciones que ha ido dejando desde momentos de forma nefastos para los de Zidane como grandísimas versiones que nos devolvían incluso la ilusión por luchar por todas las competiciones. Después de un inicio positivo para los blancos, las dudas comenzaban tras los pinchazos en Champions y en Liga ante equipos como Alavés, Cádiz, Shakhtar o Gladbach. Sin embargo, triunfos en citas importantes como Sevilla, Atleti o FC Barcelona, además de certificar el pase a octavos como primeros de grupo, hacían olvidar todos problemas en Valdebebas. Algo que no duraría mucho, porque volvían a encadenar una serie de tropiezos consecutivos en el inicio de 2021 que acabarían con la eliminación copera a manos del Alcoyano, un equipo de 2ª B.
Y en este punto se encuentra el Real Madrid. A la espera de ver que pasa ante el Atalanta, están a 8 puntos (que pueden ser 11) del Atleti y eliminados en Copa del Rey. Mientras tanto, siguen buscando una regularidad que le lleve a una versión competitiva y poder dar la talla en lo que queda de temporada. En este proceso, los blancos se están encontrando con un duro impedimento en el camino: las lesiones. De hecho, cuando parecía que Zidane había dado con el once ideal por el que apostar el resto de campaña, han empezado a caer futbolistas de tal manera que incluso ha sido difícil para el francés configurar algunas convocatorias. A día de hoy, Zidane no puede contar con Hazard, Marcelo, Odriozola, Ramos, Valverde, Rodrygo ni Militao. Y da gracias porque por fin recupera a Carvajal o Lucas Vázquez. Una serie de nombres (algunos de mucha talla e importancia dentro de la planificación deportiva) que limitan mucho la acción del míster en el caso de ausentarse. Pues bien, pese a ello, parece que el Madrid está volviendo a dejar buenas sensaciones estos últimos encuentros y empieza a recordar al que vimos en el último tramo de 2020. Dos victorias consecutivas ante Huesca o Getafe en las que además se ha visto una mejoría en cuanto al juego. En este último, frente a los azulones, ZZ probó un nuevo sistema con 3 centrales y en el que vimos a un Mendy en una nueva posición, un mejor y más liberado Marcelo y un debutante que dio la talla como fue Marvin. Un encuentro que volvió a dar alas a los vigentes campeones de la Liga para volver a competir.
Pero este buen momento de forma deben de confirmarlo los madridistas este fin de semana. Y no será precisamente ante un rival asequible. El Valencia de Javi Gracia visitará el Alfredo Di Estéfano en uno de los peores momentos del club como entidad desde hace varias temporadas. Tras la salida de Marcelino del club ché y la desmantelación de Lim en cuanto a plantilla se refiere, los valencianos no han vuelto a ser ese equipo temible que vimos con el ahora entrenador del Athletic en los banquillos. Sin embargo, no suelen ser un rival a priori fácil para los blancos. De hecho, ya dieron la sorpresa en la primera vuelta, tras el 4-1 a favor del Valencia con un hat trick de Soler. Además, estos tres puntos se postulan como fundamentales para el equipo de Javi Gracia, ya que pese a encontrarse duodécimos, ven el descenso a tan solo 3 puntos y la inestabilidad del club hace que la permanencia se ponga más cara si cabe.
Por tanto, duelo de altura el que veremos este domingo en Madrid entre dos equipos que no llegan en su mejor momento. Veremos que nos deparan ambos conjuntos.
POR: ANTONIO MATEOS
@Antonio_MateosR
AM