El Real Madrid iguala la serie a uno tras vencer por 98-91 en la final de la Liga Endesa a un Kirolbet Baskonia que se vio afectado principalmente por un fatídico tercer cuarto (31-13 de parcial). Las mejores actuaciones fueron de Thompkins, con 16 puntos, Ayón, que se reivindicaba del partido anterior con 14 puntos y 10 rebotes, y un Tavares que le ganó el duelo a Poirier, además de ser un seguro en defensa y participando en ataque. Cabe destacar que Felipe Reyes llegó a la marca de los 8.050 puntos, convirtiéndose en el quinto máximo anotador histórico de la ACB.
Comenzaban fuertes los locales con un 2+1 de Felipe Reyes. Con Shengelia y Taylor y Carroll intercambiándose triples, el partido cogía un ritmo trepidante rápidamente. Seguía el Real Madrid con buena ofensiva gracias a otro 2+1 de un enchufado Jeffery Taylor. Y es que ningún equipo fallaba: triple de Matt Janning y otro de Bildoza tras un error en el saque en la siguiente jugada, a los que respondería Campazzo con otro triple para poner el 15-15. Rompería el empate Matt Janning con otro triple, y, por si fuera poco, otro más seguido (3/3 en tiros de triple) a su favor. El Baskonia llegaría a la máxima con un +10 que llegaría de la mano de Voigtmann.
No obstante, los blancos seguirían peleando el partido y se acercarían el el marcador mediante un parcial de 5-0 y un taponazo de Walter Tavares a un agresivo Poirier (22-27 a falta de 3′ para el cierre del cuarto). Una técnica a Campazzo permitiría a los vitorianos seguir imponiendo un ritmo ofensivo que los de Laso no podían seguir, viéndose castigados por la falta de contundencia en el rebote ofensivo.
La entrada de Ayón y Thompkins le daría otro aire a un Real Madrid que lo necesitaba. Si parecía que el mexicano no dio su mejor versión en el primer partido, en este se presentó con ganas de venganza, que demostró secando a Poirier. Esto y la versión de un gran Thompkins que, con 11 puntos daba un nuevo impulso a los blancos, que ya se creían la remontada. Un parcial de 19-7 permitía ponerse por delante a los locales a falta de cuatro minutos para el descanso (43-40). Sin embargo, el Kirolbet Baskonia seguiría haciendo daño mediante Matt Janning, quien seguía enchufado (5/5 en triples) y un Bildoza muy activo. Llegaría el descanso en el WiZink con un 52-52 que dejaba el partido abierto a cualquier equipo.
Tras el descanso, veríamos un Real Madrid contundente en el rebote defensivo y eficiente en el otro lado de la cancha. La actuación defensiva de Tavares con tres tapones fue clave. De esta manera, los de Laso conseguirían un parcial de 21-5 a falta de dos minutos para el último cuarto, poniendo un +20 de ventaja en lo que sería un grandísimo tercer cuarto en el que los blancos dejarían al Baskonia con 13 puntos (83-65).
En el cuarto decisivo, los visitantes estaban determinados a remontar: se presentaron agresivos en ataque y supieron aguantar la avalancha madridista. Sería fundamental el rebote para los de Laso, a los que les bastarían acciones ofensivas de Tavares o Carroll (2 triples y 8 puntos en el cuarto) para cerrar el partido y llevarse una victoria importante que iguala la serie.