Veteranos y noveles
Se acabó la primera fase de Champions. Y casi es lo mejor que le podía pasar al Madrid, que sigue mostrando síntomas de poca fiabilidad y una irregularidad preocupante. Por suerte la clasificación ya estaba cerrada y sólo queda esperar que en febrero el equipo haya despegado, algo que ya hemos visto en otras temporadas.
Aprovechando que no había nada en juego, Solari puso en el terreno de juego un once mezcla de jugadores experimentados como Benzema, Marcelo o Isco y otros jóvenes entre los que estaban Vinícius, Javi Sánchez y Fede Valverde. El partido comenzó frío, con el Madrid dominando pero sin crear ocasiones claras. A partir del 15’ el equipo blanco se soltó la cadena y empezó a encadenar oportunidades de gol. La primera una gran jugada de Vinícius, que puso el balón en el área y Benzema no llegó al remate. Posteriormente, una vez más Vinícius está a punto de hacer el primero y el rechace lo mandó Asensio al larguero. El brasileño y el mallorquín eran los dos jugadores más destacados de los madridistas.
A la media hora de partido íbamos a ver la mejor ocasión del Real Madrid. Una jugada de tiralíneas entre Vinícius, Benzema y Asensio la acabaría perdonando este último al rematar al centro de la portería y poniéndoselo fácil al guardameta.
Lo que parecía iba a ser un encuentro tranquilo y en el que el gol iba a ser cuestión de minutos, se acabó convirtiendo en una pesadilla. En el 35’ empezaba a estirarse el equipo ruso y llegaba al área del Madrid cada vez con más asiduidad. Y en la primera ocasión que tuvieron, pusieron el 0-1 en el marcador, obra de Chalov. Si en Huesca tuvimos la suerte de cara, aquí nos fue esquiva y nos veíamos detrás en el marcador sin merecerlo. Pero este equipo ha perdido lo que siempre caracterizaba al Real Madrid, el saber sobreponerse aun gol en contra. Y a los cinco minutos, Marcelo, que sigue de pretemporada,veía cómo una vez más le ganaban la espalda y el 0-2 subía al marcador tras un rechace de Courtois que acabaría aprovechando Schelnnikov.
Así llegaríamos al descanso, del que nunca pareció volver el equipo de Solari. Resulta curioso cómo se cae el equipo cuando se ve por detrás en el marcador. En la reanudación, Bale sustituiría a Benzema, pero los blancos no terminaban de creer en la remontada y en la segunda parte no hicieron apenas ocasiones, salvo una muy clara que acabó perdonando Isco. Tras esa jugada, el malagueño se encararía con el público y fue reprendido con una sonora y continúa pitada cada vez que tocaba la pelota. No le va a ayudar esto al mediapunta del Real Madrid, que no atraviesa su mejor momento desde que llegó al Bernabéu.
En el 57’ Kroos saldría por Llorente. Para acabar de tocar fondo, aún quedaría ver cómo el CSKA aumentaba su ventaja. Un balón en el área lo acabaría cruzando al segundo palo Sigurdsson haciendo el definitivo 0-3. El gol hizo que un desesperado Courtois le pidiera explicaciones a una defensa muy joven y que acabó pagando su inexperiencia.
Lo que quedaba de ahí hasta el final iba a ser un calvario para equipo y afición. Afortunadamente la derrota ha venido en un momento en el que nada nos jugábamos; además, siendo justos hay que decir que el marcador tampoco refleja lo visto en el campo, fundamentalmente en la primera parte. Pero el equipo sigue con dudas y no termina de despegar, alternando victorias y derrotas con demasiada facilidad. Esperemos, como decíamos al principio, que cuando lleguen los octavos de final veamos un conjunto mucho más firme. Al menos eso sí, no habrá que volver a enfrentarse al equipo ruso, al que la victoria no le valió para entrar en la Europa League.
XI Real Madrid: Courtois, Odriozola, Vallejo, Javi Sánchez, Marcelo (Carvajal 74´), M. Llorente (Kroos 58´), F. Valverde, Isco, Asensio, Vinícius Jr., Benzema (Bale 46´).