Victoria plácida del Real Madrid que sirvió para darle minutos a los menos habituales y donde se certificó el pleno de victorias en casa. La presencia más destacada fuera de la pista fue la de nuestra leyenda y socio de honor Luka Doncic que, una vez finalizada su temporada en EEUU, no dudó en pasarse por el Movistar Arena a la que siempre será su casa. Dentro de la pista, Edy Tavares fue el que lideró al equipo con 11 puntos 10 rebotes para 22 de valoración, que también recibió el premio al mejor defensor de la temporada en la Liga Endesa.
También destacar el partido de Hugo González tanto en ataque como en defensa con 13 puntos y 15 de valoración y Mario Hezonja con 19 puntos, 2 rebotes y 2 asistencias para 17 de valoración.
Con la mente ya puesta en los Play-offs de la Liga Endesa, el conjunto entrenado por Chus Mateo encaraba su último partido en casa con la tranquilidad de saber que ya nada estaba en juego. Tras un primer cuarto donde arrancó muy fuerte con un 18-9 en los primeros 10 minutos, en el segundo cuarto se bajaron unas cuantas marchas pero el desacierto y las pérdidas de los andaluces hicieron que no bajara ese +9.
La segunda parte tuvo un guión muy parecido a la primera con un intercambio de golpes constante y donde no pasó nada reseñable y donde apenas se rebasaron los 50 puntos a falta de 3 minutos para el final del tercer cuarto, que acabó con un +7 para los blancos. En el último cuarto, la renta se estiró por encima del +10 hasta el +12 final.
La lucha por el rebote estuvo igualada. El porcentaje de dos fue donde se decidió la victoria final con un Real Madrid muy superior frente a un errático Covirán Granada. Los triples no lucieron ni por su cantidad ni por el porcentaje de acierto hasta el tramo final y la pintura fue dominada por el físico de los madridistas donde se generaron muchos tiros libres.
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